Si hace unos años alguien hubiera dicho que el papel pintado para cocinas y baños se convertiría en tendencia, probablemente le habrían mirado con incredulidad. Pero la decoración es un ciclo, y lo que antes parecía impensable, ahora es una de las opciones más buscadas para renovar espacios con estilo y funcionalidad.

La historia del papel pintado en estas estancias es curiosa. En el siglo XVIII, las casas más lujosas lo usaban para decorar salones y dormitorios, pero jamás se habría pensado en su uso en lugares con humedad. No fue hasta la aparición del papel pintado vinílico, en el siglo XX, cuando la resistencia al agua permitió que baños y cocinas también se sumaran a esta tendencia. Hoy en día, la innovación en materiales ha llevado a que los diseños sean cada vez más sofisticados y duraderos, sin perder un ápice de elegancia.

Las casas de diseño han apostado fuerte por el papel pintado tropical, los patrones geométricos y los acabados de efecto mármol o azulejo. Y no es solo cuestión de estética: los materiales actuales son resistentes a la humedad, fáciles de limpiar y mucho más duraderos que la pintura tradicional. Gracias a esto, cada vez más hogares están incorporando papel pintado decorativo en sus baños y cocinas, logrando un impacto visual impresionante sin necesidad de obras complicadas.

Si se piensa en espacios icónicos que han apostado por esta tendencia, encontramos ejemplos en hoteles de lujo y restaurantes de alta gama, donde los diseños llamativos crean ambientes exclusivos. Incluso en las redes sociales, los diseñadores de interiores muestran cómo transformar un baño con un solo cambio: un papel pintado para paredes bien elegido puede hacer que un espacio pase de aburrido a espectacular en cuestión de horas.

Para quienes aún dudan, basta con ver cómo grandes diseñadores y firmas han lanzado sus propias colecciones de papel pintado vinílico, con estampados que parecen sacados de una exposición de arte moderno. Así que si se quiere dar un aire fresco a la cocina o convertir el baño en un oasis de estilo, el papel pintado es la opción perfecta. La moda ya no solo se lleva en la ropa, también en las paredes. Y en un mundo donde la personalización es clave, ¿por qué conformarse con lo convencional cuando se puede tener un diseño único y sorprendente?